Monedas de euro.

Monedas de euro. Europa Press

Banca

La cuenta remunerada desplaza al depósito: da más rentabilidad, no penaliza y dura más

Aunque tenga requisitos, ofrece retornos de hasta el 5%, frente al 2,8% de los depósitos, y permite retirar el dinero sin penalización.

Más información: El BCE baja por octava vez los tipos, hasta el 2%, y mantiene su previsión de crecimiento para 2025 pese a los aranceles

Publicada

La subida de los tipos de interés que se inició en 2022 prometía devolver a la vida un producto que había quedado prácticamente descatalogado por los bancos: el depósito. Pero, tres años después, la cuenta remunerada le ha robado el protagonismo.

El precio oficial del dinero ha llegado a estar a niveles considerablemente elevados por la rápida subida acometida por el BCE en quince meses. La facilidad de depósito -lo que se paga a los bancos por los depósitos a un día en el banco central- tocó en septiembre de 2023 su máximo histórico en el 4%.

Pese a ello, los depósitos no han llegado a ofrecer rentabilidades de ese nivel, aunque se han quedado cerca. En la actualidad, esta variable se sitúa en el 2% y el retorno máximo que ofrece la banca española en depósitos a plazo supera por poco ese umbral.

Las estadísticas del Banco de España así lo confirman. El tipo medio máximo que se ha llegado a pagar en los depósitos a un año ha sido del 2,617% y se alcanzó en noviembre de 2023. A dos años, ha sido del 3,255% (agosto de 2024).

Niveles por debajo del máximo que alcanzaron los tipos oficiales. El último dato disponible, correspondiente al pasado abril, refleja que en la actualidad se paga un 1,915% a un año y un 2,474% a dos años de media, en línea con el precio del dinero.

Un máximo del 2,8% TAE

Entre los bancos españoles, el depósito con mayor rentabilidad que se puede encontrar en la actualidad es el de Cetelem, que paga un 2,8% TAE a dos años si se contrata antes del 1 de julio, con un saldo máximo de 250.000 euros.

A plazos muy inferiores pueden encontrarse rentabilidades superiores. MyInvestor lanzó un depósito al 3% TAE, pero sólo para un mes, con una inversión mínima de 10.000 euros y con la condición de contratar una cartera automatizada con una inversión mínima de 3.000 euros.

Deutsche Bank, por su parte, ofrece un 1,5% TAE a un año, pero con un depósito mínimo de 50.000 euros. La remuneración puede llegar al 2,5% si se domicilia la nómina, se usa la tarjeta y se contrata un fondo.

Y, si se busca un plazo muy largo, EBN Banco ofrece un 2,25% TAE para depósitos a 42 meses, es decir, a tres años y medio.

El problema de los superdepósitos

Algunos de estos son los llamados superdepósitos, que ofrecen una elevada rentabilidad a un plazo muy corto. Una fórmula que no gusta a los expertos del comparador financiero Help My Cash.

"Lo que ofrecen en realidad es otra cosa: productos de plazo ínfimo, con condiciones exigentes y al final, lo que gana el ahorrador por su dinero roza el insulto, sobre todo para aquellos que buscan proteger su dinero sin asumir riesgos", explican.

De hecho, consideran que "para el ahorrador conservador, esto no es una oportunidad: es una estrategia de captación comercial. Porque, por lo general, las personas con perfiles más cautelosos no están interesados en poner su dinero en el mercado, lo que buscan en una rentabilidad garantizada y sin correr riesgo".

Y es que "un superdepósito al 3,5% TAE durante dos meses suena irresistible, pero la realidad es
menos brillante: ese 3,5% no es lo que vas a ganar, sino lo que obtendrías si el dinero estuviera bloqueado un año. En dos meses, la rentabilidad real apenas roza el 0,60% bruto".

Cuentas remuneradas

Es por eso que las cuentas remuneradas se están comiendo a los depósitos. Por lo general, ofrecen una rentabilidad más alta, con el atractivo de que no tienen un plazo y se puede retirar el dinero en cualquier momento sin penalización.

Eso sí, hay que tener en cuenta que muchas veces el retorno prometido viene ligado al cumplimiento de una serie de requisitos, como la domiciliación de la nómina, el uso de una tarjeta o la aportación a un producto de inversión.

Con estas condiciones, en el mercado se pueden encontrar cuentas nómina que pagan el 5% TAE un año, como las de Bankinter o Ibercaja.

Y también cuentas sin requisitos varios, como la Cuenta Online Sabadell, que paga un 2% TAE hasta 20.000 euros, o la Cuenta Health de B100 (Abanca), que abona 3,20% TAE si se cumplen objetivos de salud.

Dinero en efectivo

Y hay otro tipo de remuneración que los bancos ofrecen a los clientes y no es a través de un depósito o una cuenta remunerada, sino de un premio en efectivo a cambio de domiciliar la nómina. Se trata de una suerte de rentabilidad encubierta.

A día de hoy, los bancos españoles ofrecen hasta 500 euros a tocateja para aquellos clientes que cumplan sus requisitos. Este es el importe que paga Abanca a cambio de domiciliar una nómina de más de 1.200 euros.

ING, por su parte, abona 200 euros en efectivo (y aporta una rentabilidad por el ahorro) si se cumple esta condición, mientras que Santander paga 400 euros.