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Observatorio de la Energía

El apagón fuerza a la CNMC a adelantar el nuevo mercado de tensión de red, ideado en 2023 por el exceso de renovables

El proyecto fue a propuesta de Red Eléctrica para garantizar la estabilidad del sistema eléctrico con una tensión dentro de los umbrales de seguridad.

Más información: ¿Un exceso de renovables? Redeia y la CNMC ya avisaron de que podrían provocar "incidentes en el suministro"

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El apagón ocurrido el pasado 28 de abril está provocando cambios en la gestión de la red eléctrica. Desde entonces, el operador del sistema, Red Eléctrica (REE), ha modificado la combinación de tecnologías para reforzar la estabilidad del sistema, reduciendo la generación fotovoltaica y multiplicando la presencia de tecnologías convencionales (hidráulica, nuclear y ciclos combinados).

Pero no sólo está previsto que estas medidas sirvan para aportar inercia y capacidad de respuesta rápida al mix eléctrico y eviten futuros apagones.

La CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) estaría adelantando el lanzamiento de un nuevo mercado, el de control de tensión, para dentro de unos meses, pese a la prórroga de un año que se concedió a finales de diciembre pasado, según han señalado fuentes del sector eléctrico a EL ESPAÑOL-Invertia.

Su objetivo es que este mercado de control de tensión en la red eléctrica se inicie a través de proyectos piloto y consultas públicas, con el objetivo de adaptar el sistema eléctrico a la creciente penetración de energías renovables y garantizar la estabilidad de la red.

Una propuesta que surgió de Red Eléctrica en 2023 y cuyo objetivo era el de mantener la tensión dentro de los umbrales de seguridad por el aumento de la generación renovable, pero esta vez participando el lado de la demanda, de los grandes consumidores.

Es la segunda parte de una iniciativa que comenzó en 2022, pero con la participación de las centrales de generación y en zonas "donde exista un mayor número de proveedores para garantizar un elevado nivel de competencia y que cuenten con mayores necesidades de control de tensión".

En el documento publicado en enero pasado, se dice que las tensiones en la red de transporte no han sufrido variaciones significativas gracias a la aplicación de medidas de control de tensión, pero que los valores se han mantenido en niveles elevados.

"En algunos momentos, las tensiones de la red de transporte han llegado a alcanzar valores máximos cercanos a los umbrales permitidos por la normativa, llegando incluso a superarlos en momentos puntuales", señala.

La resolución donde se prorroga hasta finales de este año permité la adhesión de nuevos participantes "incrementando el volumen de potencia reactiva en el proyecto y permitiendo un mayor beneficio". El regulador dirigido por Cani Fernández dice que la retribución que percibieron los consumidores participantes entre febrero y noviembre de 2024 fue de 1,38 millones de euros.

Generación e industrias

Según la Resolución DCOOR/DE/004/23 de la CNMC, el mecanismo de funcionamiento integra a la demanda como agente activo y "utiliza mecanismos de mercado transparentes y no discriminatorios", en línea con la normativa europea.

Primero, el operador del sistema detecta, mediante monitorización en tiempo real, zonas de la red donde la tensión se acerca a los límites establecidos, es decir, se identifica la necesidad. Después, se solicita a los participantes que ajusten su consumo o producción de energía reactiva (por ejemplo, generando o absorbiendo energía reactiva según la necesidad de la red).

En este punto los agentes presentan ofertas con la cantidad de energía reactiva que pueden aportar y el precio al que están dispuestos a hacerlo. El operador selecciona las ofertas más eficientes económicamente para cubrir la necesidad detectada.

Y por último, los proveedores seleccionados reciben una retribución variable en función del volumen de energía reactiva gestionada y el precio de mercado acordado. Además, pueden obtener exenciones en los peajes asociados al consumo de energía reactiva.

Primero en Galicia y Andalucía

El 8 de agosto de 2022, la CNMC aprobó el primer sandbox regulatorio para el control de tensión en la red de transporte, y después en febrero y julio de 2023 se ejecutó el primer piloto en Galicia y Andalucía, con la participación exclusiva de instalaciones de generación (térmica, eólica y fotovoltaica).

En febrero de 2024 se inició un segundo sandbox regulatorio, prorrogado un año en diciembre de 2024, que permitió la participación activa de grandes consumidores industriales (peajes 6.1 a 6.4), mediante el consumo de energía reactiva excedente, la que provoca sobretensiones, una de las posibles causas del apagón del 28 de abril.

Algunos países, como Alemania, Francia e Italia, han iniciado reformas regulatorias y proyectos piloto para explorar mercados de servicios complementarios, incluida la tensión.

En Estados Unidos, el control de tensión (reactiva) se gestiona mediante contratos bilaterales o servicios obligatorios, no mediante mercados abiertos y competitivos.

En definitiva, es un sistema que busca garantizar la estabilidad del sistema eléctrico involucrando a todas las instalaciones que forman parte o están conectadas a la red eléctrica (líneas, reactancias, transformadores, generación, demanda, etc).