El ejemplar de águila real que murió envenenado en Albacete.
La Guardia Civil detiene a un hombre en Albacete por matar a un águila real de tan solo un año
El ave, criada en cautividad en Ciudad Real, había sido puesta en libertad solo unas semanas antes.
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La Guardia Civil de Albacete ha detenido a un hombre por la muerte de un águila real de tan solo un año de edad. La investigación, realizada en colaboración con Agentes Medioambientales, ha determinado que el ave murió tras ingerir un cebo envenenado.
El ejemplar de águila real había sido criado en cautividad en el Centro de Investigación Agroambiental El Chaparrillo, en Ciudad Real, y fue liberado el 5 de noviembre de 2024. Apenas unas semanas después, el 25 de noviembre, fue hallado muerto en el término municipal de Albacete con síntomas evidentes de envenenamiento.
Los veterinarios del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Albacete realizaron la necropsia y concluyeron que la muerte fue inmediata tras ingerir una paloma impregnada con sustancias tóxicas.
Perros adiestrados
La Guardia Civil activó el Plan Regional de Lucha Contra el Uso Ilegal de Venenos en el Medio Natural y, con la ayuda de perros adiestrados, localizó restos del cebo envenenado en la zona.
Las pruebas toxicológicas confirmaron la presencia de dos sustancias tóxicas en la paloma utilizada como cebo y en el estómago del águila real.
La investigación llevada a cabo por el SEPRONA y los Agentes Medioambientales permitió identificar y detener al presunto autor de los hechos, un vecino de Albacete. En su vehículo se encontraron guantes impregnados con las mismas sustancias tóxicas utilizadas en el cebo.
Especie "vulnerable"
El águila real fallecida formaba parte de un programa de reintroducción de esta especie, catalogada como "vulnerable" en el Catálogo Español de Especies Amenazadas y en el Catálogo de Especies Amenazadas de Castilla-La Mancha.
Las diligencias policiales han sido remitidas al Juzgado de Instrucción de Albacete. El detenido se enfrenta a dos presuntos delitos contra la flora y fauna: uno por la muerte de una especie protegida, castigado con penas de hasta dos años de prisión e inhabilitación para la caza, y otro por el uso de veneno en la caza, con penas de hasta dos años de prisión e inhabilitación especial.
