Pedro J. Ramírez cumple 45 años como director: primer periodista que llega a esa cota en un país democrático

Pedro J. Ramírez (Logroño, 1952) se ha convertido este martes en el primer periodista que ha dirigido grandes diarios nacionales en un país democrático durante 45 años de forma ininterrumpida.

El actual director y presidente ejecutivo de EL ESPAÑOL fue nombrado el 17 de junio de 1980 director de Diario 16. Con 28 años era el director más joven de España.

Diario 16 se encontraba al borde del cierre con una tirada minúscula. Sin embargo, ya en 1981, gracias en buena medida a la cobertura del 23-F, se situó en el podio de la prensa, inmediatamente después de El País y ABC.

Portada de Diario 16 del 18 de junio de 1980 anunciando el nombramiento de Pedro J. Ramírez como director.

Desde entonces ninguno de los tres periódicos dirigidos por Ramírez dejaría de estar ningún año en ese podio, según los auditores y medidores oficiales. En la actualidad, EL ESPAÑOL es el líder absoluto de la prensa, tras 22 meses consecutivos como diario con mayor audiencia, según GFK.

Pedro J. Ramírez permaneció nueve años en Diario 16, la práctica totalidad de la década de los ochenta. Durante esa etapa tuvo que hacer frente al golpismo militar y se implicó activamente en la investigación sobre los GAL, defendiendo en ambos casos el orden constitucional.

El 23-F Diario 16 estuvo a punto de ser tomado por un pelotón del regimiento Saboya de Leganés, que recibió la contraorden cuando los soldados ya habían subido a sus camiones.

Pese a la precariedad de sus medios, el periódico publicó esa misma noche una edición extra que se repartió en las inmediaciones del Congreso de los Diputados. Incluía un editorial escrito por Pedro J. Ramírez, llamando a la ciudadanía a movilizarse contra los golpistas.

La edición vespertina de Diaria 16 publicada el mismo 23-F.

Un año después Pedro J. Ramírez fue expulsado por el Consejo Supremo de Justicia Militar de la sala del acuartelamiento de Campamento donde se celebraba el juicio por el 23-F.

Diario 16 había publicado, con motivo del aniversario, el testimonio de un soldado que aseguraba que el capitán Álvarez-Arenas -sobrino del último ministro del Ejército de Franco- les había amenazado con un "tiro en la nuca" si no entraban en el Congreso.

Milans, Tejero y los demás se negaron a bajar a la sala del juicio si el director de Diario 16, que cubría personalmente las sesiones, no era expulsado.

El tribunal cedió al chantaje, pero semanas después, en una sentencia histórica, el Tribunal Constitucional anuló su resolución y devolvió la credencial a Pedro J. Ramírez.

Las investigaciones sobre los GAL alcanzaron su punto culminante en el verano de 1987 con el descubrimiento por parte de Melchor Miralles y Ricardo Arqués del "zulo" que la organización tenía en el sur de Francia.

Su contenido permitió a Diario 16 y al juez Garzón implicar a los policías Amedo y Domínguez y vincular a los GAL con el gobierno socialista.

Pedro J. Ramírez y Felipe González en el Congreso en 1987.

La reacción de Felipe González fue furibunda, abroncando a Pedro J. Ramírez en los pasillos del Congreso y dándole a entender que su gobierno estaba aplicando a ETA la ley del Talión: "Si ellos dejan de matarnos a nosotros, nosotros dejaremos de matarles a ellos".

Desde ese momento el Gobierno socialista redobló sus presiones sobre el editor de Diario 16, Juan Tomás de Salas, para que destituyera a Pedro J. Ramírez. Especialmente, después de que él se negara a apartar a Miralles de la investigación.

El ministro Corcuera llegó a predecir el cese de Ramírez tras un tenso debate con él en TVE.

Los hechos se precipitaron el 8 de marzo de 1989. Juan Tomás de Salas destituyó a Ramírez y su hermano Alfonso de Salas y otros dos directivos se unieron a él para promover el lanzamiento de otro periódico que continuara la investigación sobre los GAL.

Varias docenas de periodistas de Diario 16, incluido el propio Miralles, dimitieron de sus puestos y se sumaron al proyecto. También lo hicieron Paco Umbral y Forges.

Primera portada del periódico El Mundo.

El 23 de octubre de ese mismo año nació El Mundo, "un nuevo periódico para una nueva generación de lectores". El capital inicial fue de 1.700 millones de pesetas con ningún accionista por encima del 10% y un 20% de acciones liberadas en manos de los promotores. The Guardian fue uno de los inversores.

Tres años después, cuando El Mundo ya era un éxito editorial, la recesión publicitaria aconsejó buscar un accionista de referencia y los promotores eligieron al grupo italiano RCS, editor del Corriere della Sera.

RCS invirtió 4.500 millones por el 45% pero suscribió un pacto de socios con los promotores, dejando en sus manos el control editorial.

Los escándalos de González

Los primeros años de El Mundo se caracterizaron por el descubrimiento de grandes escándalos como el 'caso Juan Guerra' -que dio pie a una querella fallida del Fiscal General por orden de González-, el 'caso Filesa' sobre la financiación ilegal del PSOE o el 'caso Ibercorp', que afectaba a la llamada "beautiful people" y desembocó en las dimisiones del gobernador del Banco de España Mariano Rubio y el ministro de Economía Carlos Solchaga.

Entre tanto prosiguieron las investigaciones sobre los GAL y los fondos reservados que sirvieron para financiar la guerra sucia y los bolsillos de la cúpula de Interior.

La fuga del director de la Guardia Civil Luis Roldán dio pie a una gran exclusiva de Antonio Rubio y Manuel Cerdán que lo entrevistaron en París mientras lo buscaba la policía de medio mundo.

Portada del diario El Mundo el 3 de mayo de 1994.

El titular de esa entrevista -"No me van a engañar como a Amedo"- fue premonitorio.

Pocos meses después los policías Amedo y Domínguez confesaron ante la grabadora de Melchor Miralles y ante el juez Garzón la implicación del ministro Barrionuevo y sus colaboradores Vera y Sancristóbal en el secuestro por error del viajante Segundo Marey por los GAL.

Los dos ex altos cargos fueron detenidos y el ex ministro procesado por el Tribunal Supremo. En 1998 serían juzgados y condenados a penas de cárcel.

Entre tanto El Mundo había desvelado también el descubrimiento de los cadáveres de los etarras Lasa y Zabala, tras haber sido salvajemente torturados. El general Galindo, el gobernador de Guipúzcoa Elgorriaga y dos guardias civiles serían condenados por asesinato.

La escalada de denuncias sobre los abusos de poder del gobierno de Felipe González culminó con las exclusivas de El Mundo sobre la cintateca del CESID.

Durante años los servicios secretos habían estado grabando y archivando ilegalmente las conversaciones de políticos, empresarios y periodistas. Incluso las del Rey Juan Carlos.

Además del director del CESID Alonso Manglano, tuvieron que dimitir el vicepresidente Narcís Serra y el ministro de Defensa Julián García Vargas.

Pedro J. Ramírez, víctima de la "guerra sucia"

El Mundo interpretó la histórica victoria del PP de Aznar en marzo del 96 como "el triunfo de la información sobre el encubrimiento". Coherentemente mantuvo un fuerte pulso con el nuevo presidente -a pesar de la relación personal que Ramírez mantenía con él- para que cumpliera su promesa de desclasificar los papeles del CESID sobre la guerra sucia.

En 1997 el propio Ramírez fue víctima de esa "guerra sucia", al difundirse un vídeo sexual, fruto de un montaje organizado por un grupo de colaboradores de Felipe González. El director de El Mundo denunció los hechos ante la justicia y Cerdán y Rubio los investigaron por indicación de Ramírez "como si afectaran a cualquier otra persona".

Tres años después los culpables fueron condenados a penas de cárcel. Entre ellos estaban tanto la mujer utilizada en el montaje y el colaborador de los servicios secretos que lo grabó desde dentro de un armario, como el que fuera ayudante personal de González Ángel Patón, el ex gobernador de Guipúzcoa Goñi Tirapu y el abogado Rodríguez Menéndez.

El ex número dos de Interior, Rafael Vera, fue juzgado y absuelto. La sentencia consideraba "probable" su culpabilidad, pero no había llegado a la "certeza". Poco después del juicio Goñi declaró que había recogido en su casa 50 millones de pesetas para pagar por el vídeo.

La sentencia del Tribunal Supremo acreditó que esas personas, vinculadas la guerra sucia, habían recurrido a ese montaje para "tratar de alterar la línea editorial e informativa de El Mundo". Había sido, según el difunto Antonio Herrero, "el último atentado de los GAL".

La guerra de Irak y el 11-M

En el pináculo de su prestigio e influencia, El Mundo volvería a enfrentarse al Gobierno de Aznar con motivo de la foto de las Azores y el respaldo de España a la invasión norteamericana de Irak.

Pedro J. Ramírez enumeró en una de sus Cartas de los domingos hasta "cien razones" en contra de esa guerra. La razón 101 fue la muerte del enviado especial del periódico Julio Anguita Parrado durante el cerco de Bagdad.

Fue el tercer mártir de El Mundo por la causa de la libertad de expresión, después de que ETA asesinara al columnista López de Lacalle y de que un grupo armado hiciera lo propio con Julio Fuentes en Afganistán.

El Mundo cubrió con gran intensidad informativa la masacre del 11-M. Fue el único de los grandes periódicos que no atribuyó la masacre a ETA en su edición especial de esa tarde y desplegó todos sus medios en tratar de averiguar lo sucedido.

Durante la etapa de Zapatero sus investigaciones y críticas a la versión oficial que terminaría plasmada en la sentencia del juez Gómez Bermúdez le colocaron en la picota de la izquierda gubernamental. También dieron pie a un debate intenso en el seno de la propia redacción de El Mundo.

El periódico desveló que parte de los imputados eran confidentes policiales, que no había habido una prueba pericial de explosivos con valor científico -el Tribunal la encargó tres años después de los hechos-, que se habían omitido pruebas exculpatorias para el condenado Zougam o que una de las dos testigos rumanas que determinaron su condena había sido rechazada como víctima antes de que le "reconociera" con un año de retraso.

Estas revelaciones dieron pie a una demanda de protección del honor del comisario jefe de los Tedax Sánchez Manzano contra Pedro J. Ramírez y otros cuatro periodistas de El Mundo.

Durante la instrucción, el vicedirector Casimiro García-Abadillo probó, con ayuda de un perito, que el modelo de teléfono de la mochila de Vallecas no conservaba la hora, tal y como había afirmado la Policía para vincularlo a los atentados.

La financiación ilegal del PP

Tras la crisis económica y la victoria de Rajoy por mayoría absoluta, El Mundo, que había pedido el voto para el PP en casi todas las elecciones, centró sus investigaciones en la financiación ilegal del partido de la calle Génova. Concretamente en las actividades del que fuera su tesorero Luis Bárcenas.

También en las derivadas financieras de la relación entre Juan Carlos I y su amante Corina Zu-Wittgenstein, a la que entrevistó Ana Romero en Mónaco y Londres.

Las declaraciones de Corinna sirvieron de puente entre los escándalos del Jefe del Estado y el llamado "caso Noos" que habían descubierto en Baleares Eduardo Inda y Esteban Urrreiztieta y llevarían a la infanta Cristina al banquillo y a su marido Iñaki Urdangarín a la cárcel.

En julio de 2013, Pedro J. Ramírez publicó un artículo titulado "Cuatro horas con Bárcenas" en el que el extesorero describía con todo detalle el funcionamiento de la caja B del PP. El impacto fue enorme.

A ello se le añadirían la publicación y entrega a la Justicia de un original de esa documentación paralela y la divulgación de los mensajes de texto de Rajoy a Bárcenas. Entre ellos figuraba el famoso "Luis, sé fuerte" posterior al hallazgo de su millonario botín en Suiza.

El Mundo pidió reiteradamente la dimisión de Rajoy, pero el PP cerró filas y le permitió eludir su flagrante responsabilidad política. El presidente acorralado acusó desde la tribuna del Congreso al director de El Mundo de estar en el centro de una "campaña de calumnias".

Desde ese momento la suerte de Pedro J. Ramírez quedó echada. Tras meses de maniobras, impulsadas por el gobierno y la Casa Real con la intervención activa del presidente de Telefónica César Alierta -implicado en un caso de información privilegiada desvelado también por El Mundo-, los accionistas italianos entregaron la cabeza del director.

En enero de 2014, Pedro J. Ramírez fue destituido al frente del periódico que había fundado un cuarto de siglo antes. Si de Diario 16 le había echado un gobierno del PSOE, de El Mundo le echaba un gobierno del PP.

Tras un intervalo de nueve meses en los que ejerció de presidente de La Aventura de la Historia y mantuvo sus cartas dominicales, El Mundo decidió no publicar su artículo "El estafermo", dedicado a la figura de Rajoy. Eso supuso la terminación del pacto de no competencia suscrito por las partes.

EL ESPAÑOL, un "caso de autoempleo”

Tras unas frenéticas semanas preparatorias, el 1 de enero de 2015 Pedro J. Ramírez anunció la fundación de EL ESPAÑOL con las campanadas del nuevo año.

"Fue un caso de autoempleo", ha bromeado el hoy director y presidente ejecutivo del periódico. Lo cierto es que Ramírez decidió invertir en EL ESPAÑOL la totalidad de lo que Hacienda le dejó de su indemnización como director de El Mundo.

Ello contribuyó sin duda a que más de 5.400 pequeños accionistas se sumaran al proyecto mediante un crowdfunding que batió el record mundial en el sector de medios de comunicación.

Pedro J. Ramírez, presidente y director de EL ESPAÑOL.

Tras superar graves dificultades tecnológicas y asumir significativas pérdidas durante sus primeros años de vida, EL ESPAÑOL equilibró sus cuentas y entró en beneficios en 2021. Poco antes había reforzado su Consejo de Administración con la incorporación de personalidades independientes como Gregorio Marañón o Juan Abarca y el nombramiento de Cruz Sánchez de Lara como Vicepresidenta Ejecutiva.

La gran cobertura de la pandemia permitió a EL ESPAÑOL escalar hasta la cima de la prensa y según el medidor oficial del sector, GFK Dam, se ha mantenido durante los últimos 22 meses como líder absoluto en audiencia. Los otros dos sistemas de medición existentes, Comscore y OJD interactiva así lo corroboran.

A lo largo de su década de vida EL ESPAÑOL ha combinado su fuerte crecimiento orgánico con el desarrollo regional y la incorporación a su oferta de portales verticales especializados como Invertia, Magas o Enclave ODS. Asimismo, viene distinguiéndose por eventos tan importantes como Wake Up, Spain! o las Top 100 Mujeres Líderes.

Desde su creación, EL ESPAÑOL viene manteniendo una línea editorial de carácter liberal, centrista y progresista, con la defensa de la Constitución como eje vertebral. Así quedó de manifiesto con motivo de lo ocurrido en 2017 en Cataluña.

Pese a las reticencias que merecía la participación de los grupos separatistas en la moción de censura que aupó a Sánchez y las tensiones que ocasionó la coalición con Podemos, el periódico mantuvo una posición de crítica moderada durante los primeros cinco años de gobierno socialista, apoyando su institucionalidad.

La derrota electoral de Sánchez y su acuerdo con el prófugo Puigdemont para mantenerse en el poder a cambio de la amnistía obligó al periódico a posicionarse rotundamente en contra de la fórmula resultante.

Los casos de corrupción del PSOE

Como ocurriera con Diario 16 y El Mundo, EL ESPAÑOL está teniendo ahora un papel determinante en la investigación de los casos de corrupción del PSOE de Pedro Sánchez. Las revelaciones de Jorge Calabrés y Arturo Criado, las exclusivas judiciales de María Peral o los análisis y noticias políticas de Fernando Garea y Alberto Prieto están contribuyendo decisivamente al conocimiento de causa de los lectores.

EL ESPAÑOL ha definido nítidamente su posición tras el último auto de la UCO sobre la década de corrupción coordinada por Ábalos y Santos Cerdán mediante un editorial titulado "Sánchez debe dimitir, haya o no elecciones" y la última Carta del Director titulada "La agonía de un tramposo".

Con motivo de estos 45 años de Pedro J. Ramírez como director de periódicos, EL ESPAÑOL publicará en los próximos tres días una serie de tres conversaciones sobre el pasado, presente y futuro del periodismo. Tendrán como conductor a Daniel Ramírez y contarán con la participación de Lucía Méndez, María Peral y Lorena G. Maldonado.

También con este motivo nuestro departamento de marketing lanzará una oferta especial para suscribirse al periódico, añadiendo 45 días de regalo a la tarifa promocional más ventajosa. Serán 12 euros a cambio de trece meses y medio de acceso a todos los contenidos de EL ESPAÑOL, incluidas las Cartas del Director y los comentarios con los que Pedro J. Ramírez encabeza de lunes a viernes la newsletter El Despertador.

"Hagámoslo juntos, celebrémoslo juntos", ha comentado el director y presidente ejecutivo de EL ESPAÑOL en el vídeo promocional.